El Starliner aterrizó sin incidentes en la zona occidental de EE.UU. dos días después de producirse una incidencia tras el lanzamiento
Nuevo México, 22 de diciembre de 2019 – La primera misión del CST-100 Starliner de Boeing concluyó de forma histórica hoy al convertirse en la primera cápsula espacial orbital estadounidense en aterrizar en suelo estadounidense en lugar de en el océano.
El módulo de la tripulación de la nave espacial aterrizó en el Missile Range del ejército estadounidense en White Sands a las 5:48 horas, hora del Pacífico, tras pasar poco más de dos días en órbita y cumplir una serie de objetivos dentro de la prueba de vuelo. La última vez que una nave espacial aterrizó en la histórica pista de aterrizaje del Puerto Espacial de White Sands fue en 1982, cuando el aterrizaje del transbordador espacial Columbia puso fin a su misión STS-3.
Poco después de su lanzamiento el 20 de diciembre y la separación de su cohete propulsor, el Starliner experimentó una anomalía en el cronometraje de la misión, resultando en un consumo excesivo de combustible que imposibilitó que llegara a su destino previsto, la Estación Espacial Internacional. Los controladores de vuelo pudieron abordar el problema y colocar al Starliner en una órbita estable más baja. El vehículo demostró el funcionamiento de los sistemas y capacidades clave antes de recibir la orden de regresar a la Tierra.
El aterrizaje del Starliner demostró la robustez de sus sistemas de aterrizaje, incluidos sus innovadores paracaídas y airbags.
Aunque este Starliner no llevaba personas, sí tenía un pasajero. Se trata de un dispositivo antropométrico de prueba, llamado «Rosie», que ocupó el asiento del comandante durante toda la misión. Estaba equipada con una docena de sensores que recopilaron datos para ayudar a demostrar que Starliner es seguro para futuras tripulaciones humanas.