El Falcon Heavy ha despegado con éxito y la recuperación de los boosters ha sido casi perfecta: dos de los tres cohetes Falcon 9 que lo componen han aterrizado correctamente para ser reutilizados en el futuro, aunque el tercero ha acabado impactando contra el mar a 480 km/h.
Elon Musk. decía no estar seguro de que el despegue del primer Falcon Heavy fuera a ser exitoso. De hecho, era bastante escéptico (o decía serlo), asegurando que creía que sólo había un 50% de posibilidades de que el lanzador no explotara. Y vaya se equivocaba.
Dos de tres cohetes recuperados…
La maniobra ha seguido las fases previstas que podéis ver en el esquema que os dejamos sobre estas líneas y que compartían desde SpaceX. El Falcon Heavy, compuesto por tres cohetes más pequeños, despegaba y ascendía como estaba previsto. Una vez alcanzada la altura determinada, dos de esos cohetes se separaban del principal, daban un giro en el aire y aterrizaban en tierra firme. Atentos a la imagen de los dos cohetes laterales tomando Tierra de forma casi sincronizada.
Posteriormente, y tras dejar la atmósfera terrestre, el cohete principal se separaba de la carga. El siguiente paso consistía en aterrizar en una plataforma autónoma en medio del mar. Y digo “consistía” porque la señal se cortaba en plena maniobra y todo apuntó desde el principio a que no ha aterrizó correctamente. SpaceX tardó varias horas, pero finalmente aclaró que se había estrellado contra el mar.
Todo esto son movimientos que ya habíamos visto ensayados por varios Falcon 9, pero nunca en una operación con tanta potencia (el sistema posee 27 motores orbitales) y compuesto por tres cohetes distintos y unidos que despegan al mismo tiempo.
El núcleo central no sobrevivió
Durante una conferencia telefónica, Elon Musk, CEO de SpaceX confirmó que el lanzamiento del Falcon Heavy fue todo un éxito dentro de lo que se esperaba. Sin embargo, el núcleo central del cohete no pudo ser recuperado como estaba en el plan original.
La idea era que este propulsor aterrizara sobre la plataforma robótica ubicada en el mar, pero según Musk, el núcleo se quedó sin combustible y fue imposible frenarlo para su aterrizaje. Esto provocó que se impactara contra el mar a una velocidad de más de 480 km/h a aproximadamente 100 metros de la plataforma.
Musk mencionó que están tratando de conseguir el vídeo de este impacto gracias a las cámaras que estaban ubicadas en la plataforma, pero debido a la gran cantidad de agua que arrojó el propulsor, todo parece indicar que la plataforma se volcó y ahora mismo están tratando de salvarla para recuperar el vídeo, que según Musk debe ser “una grabación bastante divertida”.
Y la “peculiar carga” que sigue su curso
La carga proseguía entonces su curso tal cual estaba previsto, dejándonos algunas imágenes para el recuerdo. A fin de cuentas, ¿quién se imaginaba hace unos años que estaríamos presenciando el lanzamiento en unos cohetes reutilizables de un coche eléctrico pilotado por un maniquí vestido de astronauta?